Un tío cariñoso
por Donna McCarthy
Los hijos de Donna disfrutan de la visita de su querido tío abuelo John (circa 1989)
El tío John era hermano de mi madre, Margaret Smith. Nunca hubo un momento en mi vida en que no estuviera presente. Algunos de mis primeros recuerdos son del tío John dirigiendo el Rosario con toda la familia después de las cenas familiares en casa de mi abuelo. Era un tío cariñoso conmigo, mi esposo y mis hijos, siempre presente en los días festivos, ocasiones especiales y siempre que lo necesitábamos. Siempre tenía tiempo para hablar con todos y sus sabias palabras nos ayudaban. Disfrutaba de las cenas familiares y nunca olvidaba decir, después de la bendición, "¡Dios bendiga al cocinero!".
Visitaba Irlanda, su lugar favorito, muchas veces y nuestros parientes irlandeses disfrutaban muchísimo de sus visitas. El béisbol era su deporte favorito y lo veía siempre por televisión. Mi papá lustraba los zapatos del tío John, mientras mi mamá le lavaba su ropa y le preparaba algo de comer cuando nos visitaba. Nunca pedía nada, pero apreciaba cualquier muestra de bondad. Era gentil, amable y tenía un gran sentido del humor.
Mi esposo Jack y yo tuvimos la fortuna de conocer a muchos colegas del tío John a lo largo de los años. Muchos fueron alumnos suyos durante sus largos años de docencia. Su ministerio fue de gran importancia para la Iglesia Católica y, también fue fructífero durante sus numerosos viajes por el mundo. Un momento culminante de sus viajes fue cuando tuvo la oportunidad de conocer al Papa Juan Pablo II.
¡El padre John siempre fue muy querido!